jueves, 21 de diciembre de 2023

FELIZ NAVIDAD

 LA MIRADA DE UN NIÑO

Si la mirada de un niño pudiera hablar creo que aprenderíamos todos muchas cosas. Aunque es muy posible que la frase más repetida de la mirada de un niño fuera: “no lo comprendo”.

La mirada de un niño no comprende la guerra, no comprende que haya que matar para vivir y que el odio al enemigo pueda más que el amor a los amigos.

La mirada de un niño no comprende que aquellos que no vamos a estar aquí para sufrirlo, tengamos tantas dificultades en ponernos de acuerdo para que él pueda disfrutar de un planeta limpio y habitable.

La mirada de un niño no comprende que la desigualdad sea lo más similar entre unos pueblos y otros, no comprende que nuestras relaciones estén basadas en la competición, porque él está “pensado” para el amor, para la colaboración, para vivir con otros.

La mirada de un niño no entiende de comparaciones; no comprende bien que tenga que ser el mejor, el primero, que tenga que ganar siempre, porque el juego, la vida la tiene para jugar, para disfrutar jugando y no comprende que para ganar los demás tengan que perder.

La mirada de un niño no sabe discutir, no comprende que los adultos seamos tan torpes para trabajar juntos; la mirada de un niño quiere otras miradas a las que admirar, y de la admiración al otro surge la cultura común, surge un proyecto en comunidad.

Quién tuviera la mirada de un niño.


Que la Navidad nos ayude a recuperarla, a buscar la paz, a que nuestros actos busquen el bien común y el cuidado de nuestro común hogar, que es la Tierra, que construyamos la paz, y no hay mejorar manera que haciendo el bien a nuestro vecino. Que la Navidad nos ayude a ver al otro como una oportunidad para disfrutar, para compartir, para sonreír.

Que la Navidad nos devuelva la mirada de un niño, porque es cierto, en Navidad celebramos que Dios se hace hombre, pero recordad, que empezó por ser Niño.

¡¡¡¡¡Feliz Navidad!!!!!

 

Equipo Pedagógico Provincial

Equipo de Titularidad

Colegios Claretianos de la Provincia de Santiago

lunes, 11 de diciembre de 2023

IDENTIDAD CLARETIANA

 

“CURSITOS A MÍ”

Soy claretiano desde niño. No, no vivo en una comunidad ni celebro misa los domingos. En mi ciudad ser claretiano es algo más. Uno pasea por la calle y en la algarabía de un grupo de niños puede escuchar esa expresión de “somos claretianos”. El sentido de pertenencia que genera este colegio en la ciudad trasciende más allá de los muros en los que se imparten sus clases. Mi padre estudió allí y tiempo después también lo hicimos mi hermana y yo, al igual que la mujer que comparte mis días y mis noches y muchos de mis grandes amigos. Cuando aún no teníamos hijos y fantaseábamos con un futuro que veíamos lejano, teníamos la certeza absoluta de que nuestras niñas estudiarían allí.

Fue precisamente volviendo de la “meva segona terra” (que comparto con nuestro querido fundador) y cuando saqué a mi directora de su farragosa labor de julio para tomar el aire, cuando entre conversaciones que poco tenían que ver con el trabajo, me espetó: “este año te toca el curso sí o sí”. Yo bajaba a Segovia a recoger a mi niña mayor a la vuelta de su campamento colegial, este año en un extraño Ourense y no el Piedralaves de toda la vida; y, en mi visita relámpago a la que tira del barco en el que todos vamos, lo que menos me esperaba era llevarme este regalo de dos semanas fuera de casa en un CURSO DE IDENTIDAD. No lo voy a negar, ella, que nos mira a todos con unos ojos especiales, debe de haber visto cosas en mí que yo no percibo ni de lejos. Y no puedo mentir, seguro que vio en los míos en ese momento que no me hacía ni pizca de gracia. ¿Cursitos a mí? Yo, que ya lo he vivido todo;  que fui alumno del colegio desde preescolar; que soy hijo de exalumno y nieto de otro; profesor del cole desde las 25 primaveras; padre de alumnas; que he vivido campamentos en Vinuesa, Benicasim y Benasque y he hecho de monitor en otros tantos. En fin…

Sin darle mayor importancia, recogí a mi pequeña niña grande y retomamos las merecidas vacaciones con la esperanza de que ese verano de un lustro de duración (como nos recuerdan el resto de los mortales que se ven en la obligación de decirnos desde el día uno lo largas que son nuestras inmerecidas vacaciones), pusiera tierra de por medio y la frágil memoria de mi querida directora no recordara nada a la vuelta de las mismas.

Ni que decir tiene que la vuelta con mi peque grande fue un disfrute y que, en las dos horas y media de AVE, me contó lo bien que lo había pasado, cómo la habían cuidado los monitores del campamento, las oraciones de la mañana y un sinfín de peripecias que, por respeto a su intimidad, no puedo desvelar aquí. Nuestro verano siguió sin novedad y con el disfrute de gente y vida que solemos tener en nuestro pequeño paraíso catalán. Pero la vuelta, por si el mero hecho de volver no fuera tristeza suficiente, tiraría por tierra mis esperanzas de que el querido alemán hubiera hecho mella en la memoria de mi directora.

Comenzamos el curso con ese septiembre que me encanta, no siempre ha sido así (las nuevas generaciones crecerán sin saber el temor con el que se afrontaba el cierre veraniego y las complicadas recuperaciones; y eso si las nuevas reformas educativas no los pasan directamente de curso solo con el simple paso del tiempo como criterio de adquisición de las consabidas competencias; competencias basadas en unos criterios de evaluación que evaluaremos mediante esos indicadores de logro. Perdón, que me pierdo). Y como el tiempo pasa volando, llegó noviembre con su maravilloso “CURSO DE IDENTIDAD, CARISMA Y ESPIRITUALIDAD CLARETIANA”. No es que tenga yo problema para relacionarme; pero, me alegré al saber que no viajaba solo. Así, acompañado por mi descubrimiento de Infantil (trabajamos en un colegio tan grande que muchas veces nos perdemos demasiadas personas interesantes por el camino) y dejando conciliada como pude una semana de suplencias, exámenes a la vista, y una maravillosa mujer que no me iba a reprochar a la vuelta el abandono con las dos caníbales que criamos, me embarque en esa semana de jornada intensas, reflexión, formación, información y mil cosas más.



A la vuelta, mi directora (mi esperanza de ver mermada su memoria no se cumple ni con rezos) me esperaba con la típica pregunta del César que te lanza a los leones para después felicitarte por haber sobrevivido: - “¿Qué?, me soltó con una media sonrisa expectante. - Hombre, después de cinco días intensos, esperaba una pregunta más profunda. – Bueno. ¿Qué te llevas?”. Así que, como sé que ella sabe escuchar muy bien, le lancé mi retahíla de gladiador victorioso, no muy diferente a su pregunta de César de turno, César con una memoria de hierro a prueba de confabulaciones de senado romano.

Los días han pasado y el poso de esa semana me ha hecho darme cuenta de que uno siempre se lleva más de lo que espera. Si tuviera que resumir en una palabra ese “¿Qué me llevo?”, sería COMUNIDAD. Sí, COMUNIDAD. Creo que eso era lo que pretendía ese pequeño hombrecillo para difundir la palabra, que lo hiciéramos en comunidad. Y si me fijo, es eso lo que me ha empapado todos estos años de mi vida, y ya empiezan a ser muchos con el aliento de esta comunidad detrás. Es el hermano Ángel Colado que hablaba con mi abuelo; el padre Melchor que dio clase a mi padre y después a mí y al que visitamos en Colmenar; son los monitores de las anécdotas de mi hija en la vuelta en AVE (algunos exalumnos míos); es mi directora que, aunque tiene la mala suerte de ser de Valladolid y no haya estudiado en uno de nuestros colegios, encarna su espíritu a la perfección; es el que me pide que escriba algo, sabe que soy muy claretiano, aunque no sea lo que todo el mundo entiende como tal; es mi compañera de viaje de E.I. que venía de batallas muy nobles en otros centros y otras ciudades; lo son los guerreros docentes que han compartido esos días conmigo (mi compi de Aranda, que vino sola y se va acompañada; mis catalanes de corazón, que tendrán que ejercer de anfitriones en la segunda parte; las dos zamoranas de raza, que pelean contra las adversidades; esa gente del norte y sus momentos; mi querido intercambio de Las Palmas; y otros muchos más). Es la COMUNIDAD, es la gente y creo que es por eso por lo que ellos son LO QUE ME LLEVO.

Creo que “COMUNIDAD” debería ser el título de alguna de las charlas que hagan los de la siguiente promoción de este CURSO DE IDENTIDAD CLARETIANA. Pero no lo digas muy alto. Esto te lo cuento a ti, además lo hago en secreto, no sea que se enteren de lo que pienso. Aún me queda otra semanita en Barcelona para completarlo del todo. ¡Cursitos a mí!

Fran Manso

Profesor del colegio Claret de Segovia, coordinador segundo ciclo de la ESO

lunes, 13 de noviembre de 2023

LA PEDAGOGÍA DE LA CORDIALIDAD

 “Tanto amó Dios al mundo…” Sobre la educación cordial

 Hay muchas maneras de hablar de la “Educación cordial”. Podríamos definirla como aquella que sitúa el foco educativo en la cercanía y la clave de su relevancia en la relación interpersonal “de corazón”. Los estudios de Psicología nos hablan de cómo los valores y el sentido de la vida los construimos desde los modelados simbólicos adquiridos en el contacto con personas significativas. Pues bien, esa significatividad adquiere su mayor expresión en aquellas personas con las que desarrollamos un vínculo de amor; significatividad que alcanza su mejor expresión en el vínculo con la madre y también con el padre.

 


Si estamos hablando de educar y no simplemente de transmitir contenidos teóricos. Si queremos referirnos a “educar para la vida”, ofreciendo un horizonte vital y una “red de sentido” que permita vivir en plenitud, tanto los momentos de plenitud como los de hundimiento, entonces estamos hablando de “educación cordial”. Es una relación educativa en la que, guardando la necesaria “distancia”, se establece una relación positiva en la que el “maestro” enseña y acompaña desde su mayor experiencia de vida. Padres y maestros han de saber hacer sentir el cariño a los educandos y, siempre desde este presupuesto, saber también poner los límites a actitudes no constructivas.

Como Misioneros Claretianos, la “cordialidad” ha de estar siempre presente en nuestro quehacer educativo. Cordialidad que refiere a nuestro ser Hijos del Corazón de María, pero que hunde sus raíces en la experiencia paterno-filial del Padre Claret, que sentía a Dios como un padre cercano lleno de “amor cordial”. Ese Padre “…que hace salir su sol sobre malos y buenos y llover sobre justos e injustos” (Mt. 5, 45-48). Educar desde el amor cordial capacita para acompañar momentos difíciles, restañar heridas y construir la confianza básica que hace posible ir superando las contrariedades de la vida y desarrollar una creatividad arriesgada. El amor cordial, cuando se siente, hace posible amar de verdad, incluso, llegando hasta dar la vida por los otros.

 


Claret, cuando quiso expresar quién y cómo debía ser alguien perteneciente a la Congregación de Misioneros, escribió la “definición” del Hijo del Corazón de María. Un Misionero Claretiano o, en general, alguien que siente el carisma claretiano como “cosa propia”, está llamado a vivir el mismo amor cordial que llenó a María. Lo curioso es que, una vez definido el claretiano como Hijo del Corazón de María, la definición entera se expresa en actitudes de un “anunciador del Evangelio”, que vive su misión “con todo el corazón y con toda el alma”, hasta entregar la vida por la causa del Evangelio.

Educar desde la “cordialidad claretiana”, es hacer presente el amor del Padre a nuestros alumnos; pero, como todo verdadero amor cordial cristiano, implica comprometerse en gastar la vida en favor de los demás, para construir un mundo de hermanos. Al fin, educar desde la cordialidad, para los que tenemos el espíritu de Claret, es educar y amar como Dios Padre lo hace. Dios se implicó en nuestra historia para darnos a conocer su rostro y su manera de ser: ser todo para los demás. Así, nosotros, tenemos que educar desde la generosidad que implica la “educación cordial”.

 

Miguel Ángel Velasco cmf
Responsable área pastoral del Equipo de Titularidad
Misioneros Claretianos, Provincia de Santiago

lunes, 25 de septiembre de 2023

¿UN CURSO MÁS?

 ABRAZA LO DISTINTO: YO SOY LA PUERTA

Bien venidos al curso 2023-2024. Un curso más. ¿Un curso más?

Cada uno tendrá su respuesta, todas legítimas y todas válidas. A nosotros nos gusta pensar que cada curso es “una oportunidad más”. Oportunidad no exenta de peligros.

El lema, como siempre, nos ayuda a enfocar. Dos ideas:

¿Qué significa abrazar lo distinto? El abrazo ha cobrado una dimensión de “actividad de riesgo”. Recordad que durante muchos meses los hemos tenido prohibidos. Volvamos a abrazar, volvamos al abrazo lento, sentido… que transforma. “Lo distinto”, para nosotros no es un concepto nuevo. Otros cursos hemos utilizado lemas que invitaban a abrirnos a otras realidades, a vivir las diferencias como riqueza, como aceptación gozosa de la singularidad de cada persona, al estilo de nuestro Dios, que es un Dios diferenciado. Nos gustaría poner apellido a lo distinto, sabiendo que tiene valor en sí mismo. Para los cristianos, lo distinto, lo diferente es deseable, es buscado y amado con un “mandamiento”, pero con una intención: hacer comunidad con el Maestro. Somos una comunidad de diferentes, pero Comunidad (Iglesia).



Qué potente es el símbolo de la Puerta. La puerta es siempre una pregunta, es una provocación, es un éxodo permanente. La valentía de abrir y entrar, la sensatez de cerrarla, el arrojo de elegir unas puertas y no otras, la confianza en que algo bueno hay detrás de ella.



Sea un “curso nuevo” o un “curso más”, ahí queda el reto: desde lo distinto, busquemos la puerta que lleva a la plenitud.

Eduquemos para el riesgo, eduquemos para saber discernir, para el atrevimiento, para hacer que nuestros alumnos se formulen las preguntas radicales de la vida. Abramos sus puertas, entremos sin miedo, es ahí donde se produce la magia, la magia de hacer comunidad, amando a cada persona en su diferencia y en su singularidad.

Casi nada. Volvamos la mirada al Padre Claret. Misionero del Abrazo a lo distinto: párroco, confesor, misionero, fundador, acompañante espiritual, predicador… Tranquilos, tenemos buen patrón para este viaje.

Buen inicio de curso.

 Equipo Pedagógico

Equipo de Titularidad

Colegios Claretianos de la Provincia de Santiago

miércoles, 5 de julio de 2023

FELIZ VERANO

 ENHORABUENA. LO VOLVIMOS A HACER

Llegados a este punto podemos decir: “lo hicimos de nuevo”, llegamos a fin de curso. Uno más.

Pero, en realidad ¿qué hemos hecho? Pues ni más ni menos que verdadera “magia”. Magia de la buena, magia de la que emana de la esencia, magia de la divina, no de la humana.

La magia de arrancar sonrisas, también alguna lágrima, la magia de crear lazos, algunos para toda la vida, la magia de ver crecer constantemente a nuestros niños, a nuestros adolescentes. La magia que ilusiona, que embelesa, que es inexplicable y que conecta con el misterio.



Ahora bien, como todo el mundo sabe, detrás de la magia hay, además de arte, mucho esfuerzo; muchas horas de ensayo, mucho pensar y mucho pasar por el corazón lo que nos pasa y lo que hacemos. Horas invisibles de preparación, de estudio, de pensar en todos y cada uno. Horas de soledad corrigiendo, evaluando… e intentando entender las bonanzas que las leyes que se suponen que nos van a ayudar en nuestra tarea, pero que muchas veces nos la complica; pero de esto ya hablaremos otro día.

Lo hicimos de nuevo y, seas veterano o novel, un curso más nunca es un curso más. Cada curso es diferente, nuevo, sorpresivo y sorprendente. Y está bien que esto sea así porque cada curso está lleno de nombres, de rostros, de miradas… que en definitiva son siempre nuevas. No es un curso más, es un nuevo curso.



Lo hicimos de nuevo si. ¿Pero, qué hicimos? Por resumirlo en una frase, “dejar huellas”. De manera consciente o no consciente somos generadores de huellas, dejamos nuestra impronta, nuestro modo de ver la vida, el mundo y a Dios. Queramos o no queramos dejamos huella en la vida de nuestros alumnos, de nuestras familias. Por supuesto no en todo, y no siempre la huella que nos gustaría, pero estamos seguros de que este curso, cada uno de nosotros, ha dejado una “buena huella” en alguien. Piénsalo. Dedica unos minutos a reconocer y a reconocerte en esa huella que un día, en una clase, en un pasillo, en una conversación, has dejado. Eso es lo que somos, eso es lo que hacemos… y por eso: ENHORABUENA, LO HICISTE DE NUEVO.



Os deseamos un feliz verano, que descanséis, que os dejéis querer y que cojáis fuerzas. La magia, la ilusión, la Fe nos espera a la vuelta de dos meses para seguir dejando huella.

Equipo Pedagógico del Equipo de Titularidad

Colegios Claretianos de la Provincia de Santiago.


lunes, 12 de junio de 2023

SI, SE PUEDE

 CÓMO AFRONTAR EL PASO DE EDUCACIÓN INFANTIL A EDUCACIÓN PRIMARIA DESDE EL TRABAJO EN ESPACIOS DE APRENDIZAJE

Para el colegio Claret de Madrid, este curso 22-23 suponía un gran reto: llegaba a 1º de Educación Primaria, la 1º promoción de Educación Infantil que venía de trabajar en un espacio abierto, en un aula globalizada, en espacios de aprendizaje.



Primero teníamos que dar respuesta a una pregunta que nos hacíamos: ¿Cómo iban a continuar estos niños y niñas en 1º de Primaria? Para dar respuesta, teníamos que implantar un sistema de aula integrada, de hiper aula, donde los niños/as desarrollaran su aprendizaje en distintos espacios. Conseguir alumnos capaces de construir su aprendizaje significativo en una sociedad cambiante.

El primer objetivo fue diseñar la metodología teniendo en cuenta el cambio de etapa y la evolución de los alumnos/as, y garantizar así la continuidad del trabajo anterior para que el logro de la transición fuera un éxito.

Creamos un aula bimodal y otra trimodal separadas por cristales abatibles, los cuales nos permiten organizar de distintas formas en función del trabajo a realizar. Además, seguimos manteniendo distintos espacios en los que trabajaban en infantil y creando nuevos, como el espacio de lectura fuera de las aulas. Este espacio cuenta con una biblioteca, alfombras y cojines para fomentar la creación de un momento agradable como es leer un libro y despertar en ellos el disfrute de la lectura.

En esta nueva concepción de aula, otro objetivo era el mobiliario: la mesa tradicional del profesor desaparecía al perder practicidad, la pizarra verde se sustituía por una blanca con ruedas utilizando rotulares e imanes por ambos lados. El nuevo mobiliario tenía que ser además de funcional, muy versátil.



Cambia el sentido de posesión del espacio e incluso de los materiales, ya que su uso es compartido y fomenta el sentimiento de equipo ya que se potencia la capacidad del alumno para integrarse con otros de su aula o de otras, pues se trabaja por niveles.

Teniendo como base el DUA (Diseño Universal de Aprendizaje), la creación de distintos espacios nos permite atender de manera individualizada a cada alumno según sus necesidades, favoreciendo la personalización del aprendizaje. Esta metodología nos permite optimizar más nuestros recursos de centro para llegar a un mayor número de alumnos, viéndose enriquecida con la introducción en el aula de los profesores de pedagogía terapéutica, los auxiliares de conversación y los profesores de apoyo. Hay momentos en los que 9 profesores se encuentran en el mismo espacio con 125 niños/as.

Este tipo de metodología requiere establecer horarios donde el tutor coincida con el resto de los tutores del equipo permitiendo llevar actividades colaborativas donde se trabajan los aspectos interpersonales e intrapersonales de nuestro alumnado pudiendo trabajar de manera simultánea. Todo esto ha supuesto una mayor coordinación, trabajo en equipo y corresponsabilidad.

La evaluación supone otro cambio, pues pasa a ser competencial y basada en rúbricas previamente conocidas por los alumnos/as, desapareciendo la heteroevaluación de exámenes o pruebas similares.

La parte de la gestión de personas es la más complicada: teníamos que hacer un grupo capaz de liderar este proyecto. Hay que tener en cuenta la creencia en el nuevo proyecto, el carácter personal de cada uno de ellos, la motivación…Ha sido un proceso lento y de mucha observación y escucha.

Nuestro equipo de profesores ha sido capaz de combinar una metodología que resulta novedosa y motivadora para el alumnado, donde las tareas propuestas animan a explorar, participar, crear, enfrentarse a otros retos generando en los alumnos un aprendizaje significativo cimentado en nuestro plan de inteligencia emocional y logrando un clima de aula en el que el aprendizaje, disfrute y convivencia positiva caminan de la mano.


Creamos un nuevo equipo al que hay que agradecer la dedicación y la ilusión que han puesto desde el principio en este nuevo proyecto.

 Cristina Pérez

Directora Pedagógica Colegio Claret de Madrid

miércoles, 24 de mayo de 2023

ECOCLARET, UNA EXPERIENCIA DE CUIDADO DE LA CASA COMÚN

 Sostenibilidad y ahorro: responsabilidad compartida

En nuestra sociedad actual, es un imperativo, una urgencia, que tomemos medidas concretas para preservar nuestro planeta y garantizar un futuro sostenible para las generaciones venideras. En este sentido, la educación desempeña un papel fundamental al trasmitir valores de sostenibilidad y conciencia ambiental desde una edad temprana. Sin embargo, la responsabilidad de educar en sostenibilidad y ahorro energético no recae únicamente en los hombros de los educadores, sino que responsabiliza a toda la comunidad educativa: alumnos, profesorado, familias y personal de administración y limpieza del Colegio Claret de Segovia.. Juntos, podemos fomentar una visión global y de cuidado de la creación, promoviendo un cambio real en nuestro entorno. Por esto y por otra muchas razones al principio de año nos embarcamos en una gran aventura, un reto al que pusimos de nombre EcoClaret.

EcoClaret no es solo un proyecto curricular, es un proyecto educativo trasversal que ha conseguido involucrar tanto a profesores y alumnos de todas las etapas educativas como a familias y personal de limpieza y administración del Colegio. Empezamos creando un equipo formado por 21 alumnos desde primero de primaria hasta segundo de bachillerato, formado también por una representación de los profesores, padres, servicio de mantenimiento y limpieza, administración, comunidad religiosa y equipo directivo  de titularidad. Formamos en gran equipo. Durante las reuniones analizamos gastos, proponemos medidas y consensuamos acciones. Finalizada la reunión, se redacta un acta que es enviado a todas las familias del Colegio. Estas reuniones se celebran una vez al mes a ellas asistimos todo el equipo energético. Pero también nos reunimos por etapas cada 15 días para elaborar la presentación que se hace todos los meses a todas las aulas del colegio para que todos sean conocedores de los progresos y de las medidas llevadas a cabo. Los más pequeños reciben la información de los alumnos de 4º de Eso en forma de espías o detectives. Hemos creado auténticos detectives de la luz y el agua en el Colegio.



En el proyecto, los alumnos asumen su papel como agentes del cambio. Los estudiantes son la clave para construir un futuro sostenible. Al educarlos en sostenibilidad y ahorro energético, les estamos proporcionando las herramientas necesarias para tomar decisiones responsables y conscientes en su vida diaria. Los proyectos escolares enfocados en la sostenibilidad, les permiten experimentar directamente la importancia de cuidar de nuestro entorno. Al involucrar a los alumnos activamente en estas iniciativas, se les empodera para convertirse en agentes del cambio en su entorno y en la sociedad en general. En este aspecto, EcoClaret, ha conseguido que sean capaces de comparar gastos reales de este año con los de la media de los tres años anteriores, hemos hablado de consumo fantasma, de ahorro energético aplicable en casa, del caudal de agua de un grifo con pulsador o sin él y de medidas que podemos adoptar y que hemos adoptado para que ese consumo se reduzca y, sobre todo, proponemos acciones concretas que tenemos que llevar a cabo para que ese consumo sea responsable. Hemos creado nuestro decálogo de buenas prácticas.

Desde EcoClaret, creemos que el profesorado somos guías y modelos a seguir. Los docentes desempeñamos un papel crucial al transmitir conocimientos y valores a sus estudiantes. Al incluir la sostenibilidad y el ahorro energético en el currículo escolar, los profesores ayudamos a los alumnos a comprender la importancia de cuidar de nuestro planeta. Además, al actuar como modelos a seguir, los educadores podemos demostrar prácticas sostenibles en su vida diaria, como el ahorro de energía, el uso responsable del agua y la reducción de residuos. Esta coherencia entre lo que se enseña y lo que se practica refuerza el mensaje de sostenibilidad y crea un entorno educativo más comprometido con el cuidado de la creación.

El Colegio en sus prácticas y desde la propia administración Colegial también educa en las gestiones. Al igual que la implicación de las familias como aliadas en la educación sostenible. La educación en sostenibilidad no termina en las puertas de la escuela, sino que debe continuar en el hogar. Las familias tienen un papel crucial en la formación de hábitos sostenibles en los niños.  Por esto mismo, el equipo ha estado formado por padres también. Ya que la implicación de la familia hace que el mensaje que reciban sea mucho más potente.

 Hemos creído importante también que el personal de administración y limpieza del colegio formase parte de este proyecto ya que ellos son los que mejor conocen en Colegio, gracias a ellos todo esto puede ser posible, sin el personal de mantenimiento no hubiéramos podido llevar a cabo algunas de las iniciativas como la de reducir el caudal de los grifos. El personal de limpieza también ha contribuido al ahorro energético ya que han añadido alguna acción adicional a lo ya que hacen de forma habitual

 


Por lo tanto, la educación en sostenibilidad y ahorro energético es una tarea colectiva que requiere el compromiso de toda la comunidad educativa. Al fomentar una visión global y de cuidado de la creación, estamos sentando las bases para un futuro sostenible. Los alumnos, el profesorado, las familias y el personal de administración y limpieza, todos desempeñan un papel vital en este proceso. Juntos, podemos educar, inspirar y generar un impacto positivo en nuestro entorno, promoviendo el respeto y la preservación de nuestro preciado planeta.

Al educar en sostenibilidad, estamos formando ciudadanos comprometidos y conscientes de su papel como agentes de cambio. Desde la perspectiva global, es fundamental que los estudiantes comprendan que vivimos en un mundo interdependiente, donde nuestras decisiones y acciones tienen consecuencias más allá de nuestro ámbito personal. Al enseñarles sobre los desafíos ambientales a nivel global, como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la escasez de recursos naturales, les estamos dotando de las herramientas necesarias para comprender la importancia de tomar decisiones informadas y responsables.

Juntos, podemos construir un futuro más sostenible y responsable con nuestra creación.

Arancha Sebastián

Profesora del Colegio Claret de Segovia

martes, 9 de mayo de 2023

FUENSANTA CLARET, EN ESTADO PURO

 Escuela de Cine Claret Fuensanta 3.0: “La Historia Interminable del Padre Claret”

Este curso en el colegio Claret Fuensanta hemos trabajado un Proyecto Colegial basado en el Séptimo Arte: el cine. Por ello, hemos transformado nuestro centro educativo en una Escuela de cine que buscaba dos objetivos claros:

-      Conocer todas aquellas profesiones que, en ocasiones, se olvidan una vez el producto final llega a la gran pantalla y que, sin ellas, sería imposible el cine.

-        Llevar a la pantalla temas sociales que, en la actualidad, preocupan a nuestros alumnos y así, dirigir un mensaje social que visibilice dichos temas y no los esconda a través del tabú social.

La metodología de los proyectos es clara. Debe ir construyéndose con las aportaciones de los propios alumnos y así ha sido. Nuestros alumnos han ido marcando el ritmo del proyecto y sugiriendo los cambios que han ido considerando tras las actividades desarrolladas.

Un proyecto que se inició en septiembre con dos actividades motivacionales planteadas como retos a los alumnos muy distintas y que, posteriormente, los alumnos conectaron dándole forma al Capítulo de “La Historia Interminable del Padre Claret” como producto final.

Los alumnos de infantil y primaria tenían por delante el reto de ampliar sus conocimientos de la nominación asignada a su clase y, de la mano de expertos externos que visitarían sus aulas, ir conociendo y experimentando esas profesiones que aportan muchísimo al Séptimo Arte: animación, fotografía, coreografía, maquillaje y vestuario, doblaje, efectos de sonido y guion. En cada una de las nominaciones se cuidó que realizasen algún miniproducto que se pudiese utilizar en el Día de las Familias o que fuese parte del propio Capítulo. Empezaron por una visita muy especial, la visita del actor que les explicó cómo se prepara un personaje. Tras esas visitas, los alumnos de primaria plantearon la posibilidad de continuar el contacto con el actor y producir, finalmente, un capítulo que explicase por qué el carisma y mensaje del Padre Claret sigue vivo. Ahí se empezó a gestar el producto final del proyecto colegial.

Los alumnos de secundaria tenían por delante otro reto, reflexionar sobre la actualidad y pensar qué dificultades o situaciones de nuestra sociedad se merecen llegar a la pantalla. Hablar sobre ellas, investigar, ponerse en contacto con expertos y producir cortometrajes sociales que visibilicen dichas situaciones; tal y como hubiese hecho el Padre Claret si en su época hubiese tenido una cámara para divulgar las injusticias sociales. Se realizaron asambleas en las que se exponían las preocupaciones y se moldeaba un clima escolar en el que, se dejaba claro, que de todos los temas se puede y se debe hablar teniendo en cuenta dos premisas: respetamos las opiniones y no prejuzgamos a los compañeros que exponen sus opiniones. Surgieron temas muy actuales: bullying, machismo, identidad de género, salud mental, drogas y adicciones, suicidios, uso de redes sociales, racismo y segundas oportunidades.

Cada curso de secundaria comenzó a trabajar para producir su cortometraje y, en un momento determinado de la escritura de los guiones surgió la conexión con el producto final que estaban trabajando los alumnos de primaria: ellos llevarían a la pantalla las cuestiones que al Padre Claret, en la actualidad, le preocuparían. Es más, ellos junto con los alumnos de 6º de primaria modificaron el guion del Capítulo para que se pudiese entrever las necesidades de cambios que el Padre Claret debería hacer para estar, actualmente, al servicio de la sociedad.

 Finalmente, el pasado 22 de abril, se pudo visitar en el propio centro la exposición de cada una de las actividades que han dado forma al producto final ordenadas cronológicamente. De manera que, recorriendo los pasillos del cole podías trasladarte a septiembre de 2022 y acabar en abril del 2023; caminando así por todas y cada una de las actividades que han posibilitado el producto final del Proyecto: “La Historia Interminable del Padre Claret”.


El estreno de todos los productos finales constaba del propio Capítulo, nueve cortometrajes de los temas sociales que el alumnado de secundaria decidió llevar a la pantalla y un cortometraje de animación realizado por el alumnado de infantil que, tras su participación junto con el actor que protagonizaba el capítulo dando vida al Padre Claret, decidieron crear un personaje modelado con plastilina al que nombraron “Súper C”.

Finalizando el proyecto, aproximadamente en el mes de marzo, empezamos a entrever que este proyecto nos había posibilitado construir, entre todos, un mensaje contundente a la sociedad en forma de Oda a la Vida y que nos iba a redescubrir nuestra identidad, a veces olvidada con el ritmo diario.

Ha sido una experiencia increíble reconocer a través de los ojos de nuestros propios alumnos, los valores y la idiosincrasia de nuestro centro educativo y por ende, de nuestro fundador: el Padre Claret.

 

Inma Martínez

Directora coordinadora Colegio Claret Fuensanta

Valencia

martes, 25 de abril de 2023

PACTO EDUCATIVO GLOBAL... MUCHO MÁS QUE UN PACTO

El Papa Francisco es un referente mundial; sus ideas y acciones no dejan indiferentes. Concibe la educación como “el antídoto natural a la cultura individualista” y por eso, el 12 de septiembre de 2019, nos lanzó un reto titulado, “Pacto Educativo Global”.



La provincia claretiana de Santiago comparte esa idea de educación que está en sintonía con nuestro ideario educativo. Nuestros colegios y parroquias se suman a este reto que ve en la educación una herramienta al servicio de la dignidad y el desarrollo.



Este cambio de época requiere, en palabras del papa, «educar y formar personas al servicio del bien común». El reto, quiere unir a todos los agentes sociales que sueñan el futuro de la humanidad y el planeta desde la solidaridad, la justicia, la fraternidad y la ecología.

El Pacto Educativo Global propone:

Poner a la persona en el centro del proceso educativo.  Nuestro ideario, al hablar de la identidad, afirma que “educamos en sintonía con el Humanismo cristiano y la Declaración Universal de los Derechos Humanos para lograr la formación integral de nuestros alumnos” y al exponer sus objetivos y la misión compartida, expresa el deseo de formar integralmente “según el evangelio y al estilo de Claret”, haciendo de los alumnos el centro de la misión educativa: “La razón de ser de nuestra misión educativa es cada alumno. La familia y el colegio trabajamos en misión compartida por el desarrollo de los alumnos en todas las dimensiones que favorecen su formación integral (individual, social y trascendente) según los valores evangélicos”.

Escuchar la voz de los niños, adolescentes y jóvenes y fomentar su participación para construir un futuro de justicia, paz y dignidad. Las opciones pedagógicas y metodológicas del ideario afirman que “el alumno es el principal protagonista y artífice de su propia educación. Por ello, desarrollamos una  metodología que fomenta la iniciativa, el espíritu crítico,  la creatividad y la implicación del alumno, a la vez que promueve su propia motivación e interés”. Ellos son el futuro y buscamos escuchar y dar cauce a sus inquietudes, iniciativas y propuestas.

La familia, primera e indispensable educadora. En el apartado de componentes y compromiso de la comunidad educativa del ideario, afirmamos que las familias son las primeras responsables de la educación de sus hijos y nos esforzamos en que conozcan, valoren y participen activamente de la propuesta educativa del centro.

Educar para abrirnos y acoger a los más vulnerables. La empatía, la solidaridad y el compromiso son valores esenciales que favorecen el bien común y la promoción de los más vulnerables. El ideario ve “la justicia y la solidaridad como opción por los pobres, los marginados y los excluidos, especialmente con los pueblos empobrecidos, los         migrantes y refugiados”. Educamos la dimensión social mediante actividades como tutorías, compromisos sociales, jornadas misioneras, charlas, testimonios, apadrinamientos, proyectos misioneros, comercio justo, exposiciones, etc.

 Salvaguardar y cultivar la casa común. Es la dimensión ecológica. El Ideario busca, “el respeto a la naturaleza y la defensa del medio ambiente, creando una conciencia y estilo de vida más   ecológico”. Desde pequeños sensibilizamos en el respeto y cuidado de la naturaleza, el reciclaje, el consumo responsable... Proponemos actividades en la naturaleza, convivencias, salidas a la montaña, actividades en granja escuelas, campamentos, etc, que favorecen el disfrute y el respeto de la misma. También se están estudiando medidas de sostenibilidad ecológica de nuestros centros.



Recordemos aquel proverbio africano: “para educar a un niño se necesita una aldea entera”. Este pacto es una oportunidad para sumar a todos los que buscan un futuro esperanzador.


P. Luis Arribas cmf

Prefecto de Apostolado

Provincia Claretiana de Santiago

jueves, 13 de abril de 2023

ENCUENTRO DE IDENTIDAD FAMILIA CLARETIANA. BARCELONA

QUÉ BUENO SER Y SENTIRNOS FAMILIA

Desde que nos vimos en Madrid en noviembre, hemos tenido variados mensajes del grupo.

Es bonito imaginar cómo cada un@ hace sus preparativos para lo mismo: unirse con el mismo buen propósito: descubrir más de nuestros orígenes y raíces claretianas para sustentar mejor nuestros Centros educadores. Desde esa primera foto de la mañana, desde Las Palmas, hasta el último apretón de manos de reencuentro en Tiana, se percibe que estarás con tu segunda familia, la que nos UNE para mejorar el mundo. Gracias a las Hermanas Franciscanas de los Sagrados Corazones que nos acogieron súper bien en su casa de espiritualidad en Tiana.

La primera tarde empezamos con Miren Elejalde, profesora de Askarzta Claret, que nos redescubre que evangelizar continúa siendo llevar al mundo la Buena Noticia del mensaje de Jesús y que es hoy más importante todavía. Que lo que se vive en intimidad podrá ser llevado a la “Extimidad” y exteriorizarlo. Nos invita a hablar de Dios, crear experiencias que hagan realidad lo que decimos que es bueno; centrar el compás en Jesús.

Entre ponencia y ponencia siempre hay rato de conversar, de intercambiar experiencias con compañeros de otros centros con los que poder compartir trabajo, ilusiones… tiempo de tomar aperitivos, café… y de encontrar sonrisas, bromas ingeniosas y saludos que te hacen sentir cómodo, con agrado, seguro y confiado.

Pedro Cabrera, cmf nos animaba a que nuestros centros sigan hablando de Claret mediante imágenes, cuadros, posters, roll up, mosaicos… (lo que sea) y claro está, con la oración apostólica de Claret, para que el uniforme que llevan nuestros alumnos, signifique que nunca estarán solos, porque pertenecen a nuestra FAMILIA CLARETIANA (y es muy grande).

El Padre Claret, María Antonia París, el Padre Pujol y La Madre Solá sabían lo que querían: Querían IGUALDAD de oportunidades, eran unos adelantados a su tiempo, y si les cerraban una puerta pedían guía a Dios y probaban otra.

Nos quedó también claro con Basilio Álvarez, cmf que es ahora más vital todavía nuestra MISIÓN COMPARTIDA/ASUMIDA. Es hora de, con ahínco, fortalecer nuestra labor de colaborar con la tarea claretiana. Porque estamos inmersos en la Sinodalidad, que se podría resumir, ni más ni menos, que en “trabajar juntos”.


En nuestros Centros debe de haber “dos anillos de poder”: gente creyente y gente educadora y por ósmosis provocar el gran contagio que logra un educador movido desde dentro. Somos agentes que vertebran y somos sostén de valores claretianos que sin nosotros ahora mismo, disminuirían “pila rápido” (como dirían nuestros chavales). 

Con la imagen de recoger la antorcha en unos juegos Olímpicos como recogiendo la llama claretiana sin que decaiga, nos fuimos a conocer los santos lugares de nuestros Fundadores. 


Sallent
, donde oramos en la casa de Claret: muy especial estar allí. Lugar donde nació y creció un niño Santo. 
Vic, donde pudimos ver el museo y orar y celebrar la Eucaristía a los pies del sepulcro del Padre Claret. Esa experiencia te hace sentirte más familia aún. Un sepulcro donde reposan ya sus restos, que como nos contaron, estuvieron por 9 sitios hasta ahora, que reposan allí. Reus, donde pudimos ver el museo de la Madre Antonia París y orar ante su sepulcro. Lugar de recogimiento donde 35 educadores guardamos silencios y oramos en común.

 También allí tuvimos ocasión de conocer, de la mano de Juan Manuel (Las Palmas), un megaproyecto deportivo-integrador que nos dejó boquiabiertos y demuestra que, bien guiados y coordinados, podemos llevar a cabo hermosas y valiosas iniciativas que nos diferencian y que muestran la LLAMA.

Y descubrimos también con Amparo (Fuensanta) cómo se puede ir creando un nuevo proyecto, en esta ocasión de cine, con una idea, gran interés y un poco de misterio… El que pueda se acercará a Valencia a ver el proyecto concluido; “Escuela de cine: Claret Fuensanta”. ¡¡¡Nos invitaron!!! ¡¡¡GUAY!!

Bello y cuidado ENCUENTRO donde, desde el cuaderno de oración que nos dan Josema y Mari Carmen, pasando por las siempre interesantes y oportunas anotaciones culturales de Josep, tras las ponencias y en nuestros viajes a Sallent, Vic y Reus; hasta la guinda hermosísima que fue la entrada guiada para ver la Sagrada Familia de Gaudí.

Tanto si la conocías como si no (yo no la había visto), quedas impresionado: belleza, cultura, arte, ingenio, innovación y EVANGELIO en medio de la ciudad.

Nos contaron que Gaudí quería que cualquier persona (aunque nada conociese de Jesús) pudiese descubrirle, solamente al fijarse en cada fachada de la Sagrada Familia.

El mimo y el cuidado puesto en TODO tejen una experiencia que te hace crecer, te hace conocer proyectos, estilos de Centros en un ambiente dulce y cercano donde celebramos cumpleaños de dos compañeras de lugares distantes como Sevilla y Euskadi, pero cercanos en todo lo demás: humildad, caridad y cercanía que quiere Claret.

Para recordar con una sonrisa momentos como esos cumpleaños, oraciones, eucaristías, "gracietas", saludos con gestos o con palabras, risas, fruta compartida, deporte al amanecer, charlas, blogs compartidos, abrazos de cariño al despedirse, alguna lagrimilla,… y una medalla hecha en material ecológico (que vale oro) que tengo aquí al lado y que desde las Palmas vino, y está hasta en Oporto.

En esa medalla pone “Crecer con Claret”. Pues eso.

GRACIAS POR TANTO BIEN a TOD@S. SOMOS FAMILIA.






miércoles, 8 de marzo de 2023

ENCUENTRO DE EQUIPOS DIRECTIVOS DE LA FAMILIA CLARETIANA 2023

 

UN ALTO EN EL CAMINO, DÍAS DE ENCUENTROS Y RE- ENCUENTROS

 

A finales de enero y principios de febrero se celebró en dos tandas el IX Encuentro de directivos de los Colegios de la Familia Claretiana, que engloba España, Portugal, Italia e Inglaterra.

Un total de 121 directivos; 67 en la primera tanda y 54 en la segunda se formaron bajo el inspirador título de “Identidad evangelizadora de nuestros claustros”. La persona encargada de dinamizar ambos encuentros fue Juanma de Alarcón – que es asesor del departamento pedagógico de Escuelas Católicas y fundador de Adealar – que con su guasa andaluza, intentó motivar a los asistentes haciéndoles reflexionar sobre varios aspectos:

·        Contextualizar la enseñanza

·        Volver a la esencia de la educación

·        Perfil de directivo/ perfil de líder

·        La jerarquía del servicio

·        Crear identidad

·        El educador del futuro

·        Profesores sal y profesores luz

·        Nuestra misión dentro de los colegios claretianos: Evangelizar

·        La identidad y la Misión Compartida

Fueron tres días intensos, pero donde hubo tiempo para el reencuentro después de cuatro años sin poder realizar estos encuentros de directivos; tiempo para reflexionar sobre nuestra manera de liderar, tiempos para la oración , el silencio y celebrar junto a nuestro primer líder: Jesús de Nazaret; tiempo para compartir inquietudes y escuchar otras formas de hacer las cosas en otros colegios claretianos, tiempos de risas, de cafés y de anécdotas divertidas tan necesarias entre tantas horas de despacho y reuniones.



Tras calentar motores el martes con la acogida y una primera presentación de cada colegio. El miércoles fue un día intenso, Juanma tenía preparado hasta el más mínimo detalle y pronto consiguió sacar las primeras carcajadas de los serios asistentes; desmontando muchos mitos educativos relacionados con la innovación, con los sellos de calidad, con los programas y proyectos de nuestros Centros y todo lo que hacemos… para volver a la esencia de la educación, a lo esencial, a los recuerdos, lo que toca el corazón... Y este cambio de contexto de la enseñanza, lo enlazó con el cambio de paradigma que ha sufrido también en los últimos años el perfil del directivo, pasando a ser un perfil más de líderes de los claustros.

Con su pasión no solo por la educación, sino también por la cocina, Juanma relacionó el concepto de liderazgo con el que hay en los buenos restaurantes: “¿Qué somos gerentes o los chefs de nuestros restaurantes?” Y es que la pregunta es inquietante, porque en nuestros colegios hay muy buenos gerentes y lo que cuesta conseguir son buenos chefs, que es lo que va a dar calidad a la cocina; chefs que hagan una buena oferta educativa con los ingredientes que tienen. Y queremos que los clientes se identifiquen con nuestros platos, con nuestra cocina, con el restaurante porque son esos los que se sienten identificados con el restaurante y los que al final van a volver.

Nuestra misión como líderes de los claustros, es motivar, motivar a los equipos en hacer cosas grandes, transmitiendo a nuestros profesores que son constructores de catedrales, que son importantes porque van a construir algo importante. Pero este tiene que ser un liderazgo desde el servicio para llevar a cabo la gestión de los claustros y de los equipos. Y con un liderazgo participativo, desde el servicio y no desde el poder; ejerciendo la autoridad desde el servicio, que esa era la pedagogía de Jesús de Nazaret porque nosotros también queremos inspirar a otros un modo de ser.



También es importante tener en cuenta que el líder acompaña vidas, no el trabajo. Por lo tanto, tiene que escuchar, acompañar, mirar, saber motivar, cohesionar… desde el ejemplo y el servicio. Y es que liderar es como ser comadrona en partos difíciles; hay que saber liderar en situaciones complicadas.

Cuando entra el juego el carisma, hablamos que liderar es inspirar, cada uno desde su carisma personal inspirando a los demás porque todos tenemos talentos que tenemos que poner al servicio del claustro. Y al final, estaremos liderando desde diferentes carismas; desde el Ser, desde lo que somos y no desde lo que hacemos.

Los siguientes días, el trabajo se centró en el Educador del futuro; poniendo a las personas en el centro, porque al final lo importante son los profesores y cómo transmiten al alumno. Estamos en un tiempo de ser, no de hacer. Y nuestros profesores tienen que ser sal y ser luz, tenemos que iluminar a nuestros alumnos y sus familias. Recordando la pedagogía de Jesús de Nazaret que primero se encuentra con las personas (sale al encuentro), después las acompaña (como a los discípulos de Emaús) y finalmente es luz para esas personas (dar la luz del Espíritu Santo).



Para terminar, Juanma nos hizo hincapié en que no solo somos Educadores, sino educadores cristianos y como tales tenemos que transmitir Buenas Noticias con la alegría del Evangelio. Evangelizar a tiempo y a destiempo: encontrarnos con las personas y ser transmisores de un buen trato. Porque, al fin y al cabo, la Misión de nuestros colegios es Evangelizar a los alumnos y a los claustros. Evangelizar en Misión Compartida, porque además del trabajo, los valores…  también compartimos la Identidad. Somos Comunidades Educativas porque ahí hay identidad porque no es lo mismo trabajar en tal colegio, que Ser de tal colegio.

 

Carlos Pellitero Montes

Jefe de estudios de Primaria de CODEMA

Miembro del Equipo Pedagógico Provincial