martes, 25 de abril de 2023

PACTO EDUCATIVO GLOBAL... MUCHO MÁS QUE UN PACTO

El Papa Francisco es un referente mundial; sus ideas y acciones no dejan indiferentes. Concibe la educación como “el antídoto natural a la cultura individualista” y por eso, el 12 de septiembre de 2019, nos lanzó un reto titulado, “Pacto Educativo Global”.



La provincia claretiana de Santiago comparte esa idea de educación que está en sintonía con nuestro ideario educativo. Nuestros colegios y parroquias se suman a este reto que ve en la educación una herramienta al servicio de la dignidad y el desarrollo.



Este cambio de época requiere, en palabras del papa, «educar y formar personas al servicio del bien común». El reto, quiere unir a todos los agentes sociales que sueñan el futuro de la humanidad y el planeta desde la solidaridad, la justicia, la fraternidad y la ecología.

El Pacto Educativo Global propone:

Poner a la persona en el centro del proceso educativo.  Nuestro ideario, al hablar de la identidad, afirma que “educamos en sintonía con el Humanismo cristiano y la Declaración Universal de los Derechos Humanos para lograr la formación integral de nuestros alumnos” y al exponer sus objetivos y la misión compartida, expresa el deseo de formar integralmente “según el evangelio y al estilo de Claret”, haciendo de los alumnos el centro de la misión educativa: “La razón de ser de nuestra misión educativa es cada alumno. La familia y el colegio trabajamos en misión compartida por el desarrollo de los alumnos en todas las dimensiones que favorecen su formación integral (individual, social y trascendente) según los valores evangélicos”.

Escuchar la voz de los niños, adolescentes y jóvenes y fomentar su participación para construir un futuro de justicia, paz y dignidad. Las opciones pedagógicas y metodológicas del ideario afirman que “el alumno es el principal protagonista y artífice de su propia educación. Por ello, desarrollamos una  metodología que fomenta la iniciativa, el espíritu crítico,  la creatividad y la implicación del alumno, a la vez que promueve su propia motivación e interés”. Ellos son el futuro y buscamos escuchar y dar cauce a sus inquietudes, iniciativas y propuestas.

La familia, primera e indispensable educadora. En el apartado de componentes y compromiso de la comunidad educativa del ideario, afirmamos que las familias son las primeras responsables de la educación de sus hijos y nos esforzamos en que conozcan, valoren y participen activamente de la propuesta educativa del centro.

Educar para abrirnos y acoger a los más vulnerables. La empatía, la solidaridad y el compromiso son valores esenciales que favorecen el bien común y la promoción de los más vulnerables. El ideario ve “la justicia y la solidaridad como opción por los pobres, los marginados y los excluidos, especialmente con los pueblos empobrecidos, los         migrantes y refugiados”. Educamos la dimensión social mediante actividades como tutorías, compromisos sociales, jornadas misioneras, charlas, testimonios, apadrinamientos, proyectos misioneros, comercio justo, exposiciones, etc.

 Salvaguardar y cultivar la casa común. Es la dimensión ecológica. El Ideario busca, “el respeto a la naturaleza y la defensa del medio ambiente, creando una conciencia y estilo de vida más   ecológico”. Desde pequeños sensibilizamos en el respeto y cuidado de la naturaleza, el reciclaje, el consumo responsable... Proponemos actividades en la naturaleza, convivencias, salidas a la montaña, actividades en granja escuelas, campamentos, etc, que favorecen el disfrute y el respeto de la misma. También se están estudiando medidas de sostenibilidad ecológica de nuestros centros.



Recordemos aquel proverbio africano: “para educar a un niño se necesita una aldea entera”. Este pacto es una oportunidad para sumar a todos los que buscan un futuro esperanzador.


P. Luis Arribas cmf

Prefecto de Apostolado

Provincia Claretiana de Santiago

jueves, 13 de abril de 2023

ENCUENTRO DE IDENTIDAD FAMILIA CLARETIANA. BARCELONA

QUÉ BUENO SER Y SENTIRNOS FAMILIA

Desde que nos vimos en Madrid en noviembre, hemos tenido variados mensajes del grupo.

Es bonito imaginar cómo cada un@ hace sus preparativos para lo mismo: unirse con el mismo buen propósito: descubrir más de nuestros orígenes y raíces claretianas para sustentar mejor nuestros Centros educadores. Desde esa primera foto de la mañana, desde Las Palmas, hasta el último apretón de manos de reencuentro en Tiana, se percibe que estarás con tu segunda familia, la que nos UNE para mejorar el mundo. Gracias a las Hermanas Franciscanas de los Sagrados Corazones que nos acogieron súper bien en su casa de espiritualidad en Tiana.

La primera tarde empezamos con Miren Elejalde, profesora de Askarzta Claret, que nos redescubre que evangelizar continúa siendo llevar al mundo la Buena Noticia del mensaje de Jesús y que es hoy más importante todavía. Que lo que se vive en intimidad podrá ser llevado a la “Extimidad” y exteriorizarlo. Nos invita a hablar de Dios, crear experiencias que hagan realidad lo que decimos que es bueno; centrar el compás en Jesús.

Entre ponencia y ponencia siempre hay rato de conversar, de intercambiar experiencias con compañeros de otros centros con los que poder compartir trabajo, ilusiones… tiempo de tomar aperitivos, café… y de encontrar sonrisas, bromas ingeniosas y saludos que te hacen sentir cómodo, con agrado, seguro y confiado.

Pedro Cabrera, cmf nos animaba a que nuestros centros sigan hablando de Claret mediante imágenes, cuadros, posters, roll up, mosaicos… (lo que sea) y claro está, con la oración apostólica de Claret, para que el uniforme que llevan nuestros alumnos, signifique que nunca estarán solos, porque pertenecen a nuestra FAMILIA CLARETIANA (y es muy grande).

El Padre Claret, María Antonia París, el Padre Pujol y La Madre Solá sabían lo que querían: Querían IGUALDAD de oportunidades, eran unos adelantados a su tiempo, y si les cerraban una puerta pedían guía a Dios y probaban otra.

Nos quedó también claro con Basilio Álvarez, cmf que es ahora más vital todavía nuestra MISIÓN COMPARTIDA/ASUMIDA. Es hora de, con ahínco, fortalecer nuestra labor de colaborar con la tarea claretiana. Porque estamos inmersos en la Sinodalidad, que se podría resumir, ni más ni menos, que en “trabajar juntos”.


En nuestros Centros debe de haber “dos anillos de poder”: gente creyente y gente educadora y por ósmosis provocar el gran contagio que logra un educador movido desde dentro. Somos agentes que vertebran y somos sostén de valores claretianos que sin nosotros ahora mismo, disminuirían “pila rápido” (como dirían nuestros chavales). 

Con la imagen de recoger la antorcha en unos juegos Olímpicos como recogiendo la llama claretiana sin que decaiga, nos fuimos a conocer los santos lugares de nuestros Fundadores. 


Sallent
, donde oramos en la casa de Claret: muy especial estar allí. Lugar donde nació y creció un niño Santo. 
Vic, donde pudimos ver el museo y orar y celebrar la Eucaristía a los pies del sepulcro del Padre Claret. Esa experiencia te hace sentirte más familia aún. Un sepulcro donde reposan ya sus restos, que como nos contaron, estuvieron por 9 sitios hasta ahora, que reposan allí. Reus, donde pudimos ver el museo de la Madre Antonia París y orar ante su sepulcro. Lugar de recogimiento donde 35 educadores guardamos silencios y oramos en común.

 También allí tuvimos ocasión de conocer, de la mano de Juan Manuel (Las Palmas), un megaproyecto deportivo-integrador que nos dejó boquiabiertos y demuestra que, bien guiados y coordinados, podemos llevar a cabo hermosas y valiosas iniciativas que nos diferencian y que muestran la LLAMA.

Y descubrimos también con Amparo (Fuensanta) cómo se puede ir creando un nuevo proyecto, en esta ocasión de cine, con una idea, gran interés y un poco de misterio… El que pueda se acercará a Valencia a ver el proyecto concluido; “Escuela de cine: Claret Fuensanta”. ¡¡¡Nos invitaron!!! ¡¡¡GUAY!!

Bello y cuidado ENCUENTRO donde, desde el cuaderno de oración que nos dan Josema y Mari Carmen, pasando por las siempre interesantes y oportunas anotaciones culturales de Josep, tras las ponencias y en nuestros viajes a Sallent, Vic y Reus; hasta la guinda hermosísima que fue la entrada guiada para ver la Sagrada Familia de Gaudí.

Tanto si la conocías como si no (yo no la había visto), quedas impresionado: belleza, cultura, arte, ingenio, innovación y EVANGELIO en medio de la ciudad.

Nos contaron que Gaudí quería que cualquier persona (aunque nada conociese de Jesús) pudiese descubrirle, solamente al fijarse en cada fachada de la Sagrada Familia.

El mimo y el cuidado puesto en TODO tejen una experiencia que te hace crecer, te hace conocer proyectos, estilos de Centros en un ambiente dulce y cercano donde celebramos cumpleaños de dos compañeras de lugares distantes como Sevilla y Euskadi, pero cercanos en todo lo demás: humildad, caridad y cercanía que quiere Claret.

Para recordar con una sonrisa momentos como esos cumpleaños, oraciones, eucaristías, "gracietas", saludos con gestos o con palabras, risas, fruta compartida, deporte al amanecer, charlas, blogs compartidos, abrazos de cariño al despedirse, alguna lagrimilla,… y una medalla hecha en material ecológico (que vale oro) que tengo aquí al lado y que desde las Palmas vino, y está hasta en Oporto.

En esa medalla pone “Crecer con Claret”. Pues eso.

GRACIAS POR TANTO BIEN a TOD@S. SOMOS FAMILIA.