lunes, 11 de noviembre de 2024

DANA (Con perdón)

 PARA TI

Imploro el agua que sana, el agua que calma.

Maldigo el agua que arrastra, el agua que mata.

Mentiroso el agua que fluye, el agua que cala.

 Agua que nos ahoga, el agua que solloza.

 

Imposible entender tanta tragedia. Imposible conectar con lo que deben estar sintiendo miles de personas. Imposible no preguntarse ¿por qué? Imposible hablar de ello sin pedir perdón.


Todas y cada una de las palabras aquí escritas, o escritas y dichas por todos los medios, no pueden mitigar el dolor y el sufrimiento de tantas personas dañadas, heridas, hundidas en el fango de la pena. Incluso hay palabras, escritas o dichas, que les hunden aún más.

 

Pienso en los niños. Observadores participantes, protagonistas dolorosos y muchas veces silenciosos. Pienso en la mirada de sus padres, impotente, rabiosa, acabada. ¿Qué hacer? ¿Cómo explicar a un niño lo que ha pasado? Tal vez, no debamos intentarlo; tal vez debamos intentar acercarnos a cómo se lo explica él. Un niño, una niña, siempre tiene una explicación. Escúchala.

 

Pienso en las personas mayores; aquellos que levantaron cada barrio, cada casa; que vivieron la riada del 57, que construyeron lo que hoy disfrutamos todos nosotros, este “estado de bienestar”. ¿Quién les dice que han perdido todo? Todo menos su soledad. Son fuertes, lo entenderán, y nos ayudarán a empezar de cero, porque en eso son expertos. Pero necesitan compañía.

 

Pienso en todos aquellos que de manera voluntaria o por oficio, han acudido al rescate, a la limpieza, a la ayuda. Sí, esa “generación de cristal”, que tantas veces hemos tildado de débiles, poco resilientes; aún no han comenzado las clases, los colegios han estado cerrados, que es lo más triste que le puede pasar a una sociedad; sin embargo, nos han dado una maravillosa lección de vida. Aprendamos que hay esperanza, que donde no llega el ser humano, llega la comunidad, el grupo, “la tribu”, la Iglesia. Agradécelo.

 

Hoy no hay motivo para la esperanza, pero mañana lo habrá.

 

Gonzalo Martínez Vázquez

Área pedagógica del Equipo de Titularidad

Misioneros Claretianos de la Provincia de Santiago

martes, 29 de octubre de 2024

SEGURIDAD DIGITAL

 SIN CONTROL NO HAY CONTROL

Parece una redundancia o como dirían los epistemólogos una “tautología”. Pero prefiero usar un término más llano y popular: es algo “de Perogrullo” ('obvio o notoriamente sabido'). Otra verdad obvia y notoriamente sabida es que las cosas que parecen de sentido común, en numerosas ocasiones, son las menos comunes.

Quiero aplicar esta frase al proceso de Digitalización de los centros educativos. Aplicado a los colegios de nuestra red, pero también a cualquier otro centro educativo que realiza su actividad en estos tiempos de entrada en los años medios del siglo XXI.



En los colegios, en los centros educativos, independientemente del nivel educativo y de la edad de los niños tenemos que controlar el acceso de los mismos a los procesos que actualmente denominamos “digitalizados” y más concretamente el acceso a la Red y a las Redes. Ya sea con dispositivo propio, con un proyecto de los llamados one to one, como es el de nuestros centros, o cualquier otro, es una obligación del centro y de los educadores tener el control. Actualmente disponemos de los medios necesarios para estar a los mandos de lo que un alumno puede hacer o no puede hacer, puede consultar o no, puede acceder o no. Es obligación nuestra como educadores, utilizarlos. No hacerlo, aparte de una inconsciencia es un incumplimiento grave de nuestra función como docentes.

Igualmente podemos decir de las familias. Hoy en día, cualquier dispositivo, ya sea de uso personal o de uso educativo, incorpora un sistema de control (parental) que nos permite suponer que el uso, el acceso y el tiempo de utilización del dispositivo del menor está bajo control de un adulto. Es obligación de los centros educativos ofrecer a las familias la información y la formación necesarias para que este control sea real y eficiente.


En este tema, como en otros, estamos condenados a ser reactivos. Siempre va a haber alguna brecha de seguridad que algún alumno va encontrar para acceder en tiempo o a contenidos que no debe. Pero lo que sí podemos hacer es utilizar los medios que la misma tecnología nos brinda para proteger al máximo a aquellos alumnos que no son tan versados o que tienen una estructura personal y emocional ajustada a su edad, que le va a ayudar a relacionarse con la tecnología de una manera sana y educativa.

Control, obligación, tecnología y salud. Tres términos que están relacionados y que necesariamente bien utilizados en el contexto escolar y en el contexto familiar, hacen que nuestros alumnos aprendan a aprender y aprendan a ser competentes en una sociedad imperiosamente digital de una manera serena y educativa.

 

Equipo Pedagógico Provincial

Equipo de Titularidad

Colegios Claretianos de la Provincia de Santiago

martes, 15 de octubre de 2024

A VUELTAS CON LA LECTURA

 LA LECTURA DIALÓGICA, UNA METODOLOGÍA PARA TRABAJAR EL LENGUAJE ORAL.

En el Claret de Segovia estamos implantando un proyecto para mejorar las habilidades de alfabetización de nuestros alumnos en Educación Infantil y primer ciclo de Primaria. Es un proyecto ambicioso que pretende, desde una base científica, sistematizar en estos cursos la estimulación de los aspectos sensoriomotores y del lenguaje oral, como prerrequisitos fundamentales para la adquisición de la lectoescritura. Pretendemos con él mejorar la competencia lingüística (oral y escrita) de todos los alumnos y reducir las dificultades de aprendizaje.



Dentro de este proyecto, hemos tenido una formación específica en Lectura dialógica, impartida por María Mateo, de Cuentos para crecer (https://cuentosparacrecer.org/ ), que nos responde a estas preguntas:

1.      ¿Qué es la lectura dialógica?

Es una metodología de lectura compartida que nace a finales de los 80 en estados unidos de la mano del Dr. Longian y el Dr. Whitehurst en el Stoony Brook reading and Language Programme que busca maximizar la adquisición de habilidades pre-lectoras.

 

2. ¿Qué beneficios aporta trabajar la lectura dialógica desde la etapa de infantil para el proceso de alfabetización?

La lectura dialógica tiene importantes beneficios en términos de desarrollo del lenguaje, (habilidad pre-lectora clave) en términos de trabajo sobre la futura comprensión lectora y en término de motivación, de conexión emocional con la lectura.


    3. ¿Es importante implicar a las familias? ¿Cómo?

Es importantísimo implicar a las familias. Creo que en dos sentidos: en el primero de ellos, transmitiendo mucha calma y proporcionando información sobre el proceso de adquisición de la lecto-escritura, y en segundo lugar, haciendo mucho hincapié en aquello que podemos hacer en casa: limitar tiempo de pantalla, contar muchos cuentos, hablar, hablar y hablar; salir al exterior y jugar, saltar, movernos; no forzar. Las familias tienen una labor esencial que es la ayudarnos a edificar las bases de lenguaje y el fomento lector.

 

Por tanto, es una metodología muy pautada y muy validada científicamente que mejora significativamente las habilidades prelectoras de los niños, sus habilidades lingüísticas y su motivación hacia la lectura.

 

maria@cuentosparacrecer.orh

https://www.instagram.com/cuentos_para_crecer_lecto?igsh=MXFydDhoeGVrMjNpOA==

lunes, 30 de septiembre de 2024

¿UN CURSO MÁS?

 BIENVENIDOS

Bienvenidos a este nuevo curso 24-25.

¿Un curso más? Si y no. Podemos sentir que estamos comenzando “un curso más”, o podemos “empezar un nuevo curso”. Empezar un curso más suena a más de lo mismo, suena a eterno retorno, a la imagen del simpático ratón dando vueltas dentro de una rueda para empezar y llegar al mismo sitio una vez más.

 Empezar un nuevo curso, sin embargo, suena a novedad, suena a frescura, suena a algo diferente. Los seres humanos necesitamos de la novedad, necesitamos que nuestro día a día, nuestros cursos nos ofrezcan oportunidades para “lo distinto”, para la curiosidad, para descubrir nuevas rutas. De lo contrario, la falta de novedad, la ausencia de “lo distinto”, conduce al máximo nivel de entropía, y por tanto al aburrimiento y en definitiva, a la muerte.

Como red de colegios claretianos de la provincia de Santiago afrontamos un curso distinto, un curso especial. Todos los colegios nos guiamos por Modelos Pedagógicos en secuencias de tres años, y este curso 24-25 supone el último curso del Modelo Pedagógico 22-25. Por tanto, es momento para sentir que hemos alcanzado nuestras pretensiones, que hemos avanzado, que el camino es otro y que hay varios caminos por emprender. Es un curso para evaluar y a la vez para “soñar” el futuro. Este curso, no es un curso más.

 


Para ello, el lema educativo que nos guiará los próximos meses no puede ser más oportuno. Necesitamos la luz de todos, necesitamos encender las luces largas para atisbar el futuro. Equipos directivos, departamentos de orientación, jefes de estudio, familias, alumnos, educadores, entre todos seguro que encontramos fórmulas idóneas para seguir avanzando.

Por tanto, este curso 24-25, no es un curso más, es un nuevo curso. Bienvenidos todos a la apasionante aventura de educar. Al reto de hacer que cada día sea distinto, que cada alumno sea distinto, que cada clase sea distinta. Es lo que nos apasiona, es lo que nos hace ser Educadores al estilo de Claret. Enciéndete y disfruta.

 

Equipo Pedagógico Provincial

Colegios Claretianos de la Provincia de Santiago

miércoles, 5 de junio de 2024

LA ESTRATEGIA DE COMUNICACIÓN COMO VALOR AÑADIDO

 SOMOS LO QUE COMUNICAMOS

       El interés de nuestros centros por mejorar en cada uno de los ámbitos que son inherentes a la tarea educativa, nos ha llevado a muchos a poner el  foco en nuestra capacidad para comunicar.

      No deja de ser una paradoja que, quienes basamos nuestra labor diaria en la transmisión de valores y conocimientos, quienes insistimos en que lo más importante es llegar al corazón de las personas, durante años, hayamos dejado al margen de nuestras prioridades el establecimiento de una serie de estrategias de comunicación que nos permitieran conseguir los objetivos marcados.



       Ahora, ya nadie discute que, la atención de la faceta comunicativa de los colegios, debe ser cuidada y planificada de manera expresa. Sin embargo, en algunos casos, aún se mantienen ciertas dudas sobre cómo afrontar este reto, bien por falta de recursos, o bien por falta de formación para llevarlo a cabo.

      En nuestro Colegio Claret de Segovia, cumplimos diez años, desde que nos pusimos a reflexionar y dar los primeros pasos que nos permitirían extraer unas conclusiones iniciales. Tuvimos claro que lo que no se comunica no existe y por ello establecimos un plan con una serie de etapas y acciones por desarrollar que, a día de hoy, seguimos revisando.

        Los colegios somos generadores de innovación, valores, cultura, pensamiento crítico, educación,… No parece que, siendo así, la mejor de las decisiones sea la de encerrarnos de manera endogámica, en nuestro propio hábitat sin que trascienda lo mucho y bueno que podemos aportar a la sociedad y en lo que venimos trabajando diariamente. Porque, tal vez, esta sea una de las claves de todo el proceso. Ser conscientes del contexto en el que nos incluimos.

       No todas las fórmulas valen para todos los centros, no todas las acciones se pueden extrapolar a realidades con complejidades y características específicas. La realización de una pequeña auditoría sobre cuál es el estado concreto, tanto de nuestra comunicación interna, analizando distintos aspectos propios de los cauces que empleamos y de su eficacia, como de la comunicación externa, en la que tenemos que buscar la complicidad de otros agentes y encontrar, en los diferentes medios, a nuestros mejores aliados, va a resultar fundamental de cara a la consecución de los mejores resultados.

       Hacer partícipe a todo el claustro, y al resto del personal, de la importancia de su implicación en esta iniciativa que ha de aportar valor añadido a nuestra propuesta, será esencial y proporcionará sentido de pertenencia e identificación con todo nuestro proyecto.

      Establecer un equipo de trabajo, con un organigrama bien definido en cuanto a responsables y funciones, ayudará a estructurar y a planificar las acciones a llevar a cabo, siempre - y es un error habitual- sin sobrepasar nuestras posibilidades, con los pies en el suelo, el papel lo aguanta todo pero, no siempre se ajusta a nuestros recursos.

       Nuestro plan ha de tener en cuenta que formamos parte de una sociedad concreta y que no debemos, ni podemos, ser ajenos a las necesidades y preocupaciones de ella ni a sus éxitos y avances. Tenemos que buscar momentos en los que compartir nuestra presencia y formar parte de su tejido lo que nos hará crecer como entidad en nuestra consideración reputacional.

       Además, nuestras acciones serán proactivas y no reactivas. Es bueno tomar la inciativa porque, si la información no parte de nosotros, serán otros quienes den su versión. Nuestra presencia debe ser periódica, con objeto de crear vínculo, a la vez que se dosifican, temporalmente, las aportaciones propias.

       Siempre que sea posible, convendría evitar lugares comunes que no inviten a nuestros destinatarios a captar su atención. Los contenidos aportarán el plus de quienes trabajan desde el sentimiento y la emoción. Lo que nos apasiona favorecerá nuestra creatividad y se pondrá de manifiesto en cada iniciativa que llevemos a cabo. Lo importante es transmitir algo más que datos, cuya frialdad, rara vez, ayuda a que dotemos de argumentación nuestro planteamiento.

La cantidad de posibilidades que nos ofrece la tecnología y la variedad de dispositivos y de redes sociales, no debe hacernos perder el horizonte. Lo importante no es la herramienta sino para qué y cómo la utilizamos. Elegir dónde estar y buscar la oportunidad para hacerlo son claves para que el ruido no distorsione nuestro mensaje.

 

Carlos García Fuentetaja

Profesor del Colegio Claret de Segovia

Responsable del área de Comunicación

miércoles, 22 de mayo de 2024

GRADUADOS. ¡ENHORABUENA!

 ¿HA MERECIDO LA PENA?

Llegan los días de graduar a nuestros alumnos. Y con ello se activa una de las funciones ejecutivas más relevante para el aprendizaje: la memoria. Y con la memoria, el olvido.

Recordamos gracias a que olvidamos y porque olvidamos unas cosas, recordamos otras. Tal vez la diferencia entre una vida miserable y una excelsa sea que uno no es capaz de olvidar lo malo y el otro recuerda solo lo bueno… tal vez, quien sabe.



El caso es que, digresiones filosóficas aparte, un año más despedimos en nuestros colegios a una nueva generación de alumnos. Me pregunto ¿qué se llevan? ¿qué será de ellos? ¿cuántos nos recordarán desde el cariño? ¿a quién recordarán? ¿son personas íntegras, dignas y espirituales? En definitiva: ¿ha merecido la pena?

Solo Dios sabe, y esa es nuestra confianza. Dios no hace chapuzas y como gran arquitecto, sabe que todo proyecto tiene su dosis de trabajo oscuro, en silencio, en la sombra. Quiero felicitar a las decenas de educadores que han pasado por la vida de cada uno de estos alumnos que nos deja: maestros, monitores, catequistas… cuidadores. Cada uno de ellos ha intentado sembrar lo mejor, y eso, tarde o temprano dará fruto.

Después de 6, 10 o 15 años de contacto con nosotros, ¿volverían a elegirnos las familias para educar a sus hijos? Pregunta del millón. Y quiero pensar que sí, que les ha merecido la pena. Supongo que cada familia tendrá un “pero”, una mala experiencia en momento determinado de su vida colegial, pero ¿qué viaje no tiene un sinsabor, una decepción? Y más un viaje tan largo como este. Nos entregaron su tesoro, todos valiosos. Solo espero haber contribuido a que ese tesoro sea aún más rico y valioso.



Cuando hablo con nuestros alumnos me quedo con las ganas de hacerles esta pregunta; ¿te ha merecido la pena estar con nosotros? ¿por qué? Tal vez, su bondad natural y el momento tremendamente afectivo que están viviendo les lleve a contestar que sí, pero será pasado un tiempo cuando realmente la respuesta sea más auténtica. Deseo de corazón que tengan sano orgullo de ser Claret, CODEMA, Corazón de María. Deseo que hagan brillar esa luz en sus vidas y que vuelvan a esa “pedagogía de la cordialidad”, del cuidado, de ir a lo profundo, a ese corazón de Madre, cuando las cosas no vayan del todo bien.

Por último, me pregunto si para una comunidad misionera merece la pena ocupar personas, tiempos y recursos en educación. Me pregunto ¿ha merecido la pena educar a estos chicos y chicas que hoy nos dicen adiós? La Misión está siempre “a la vuelta de la esquina” y quien no ve su Misión a la vuelta de la esquina corre el riesgo de no encontrarla jamás. Claro que ha merecido la pena. Para muchos ha sido el primer anuncio del Evangelio, para otros ha sido su confirmación en el paso de una fe recibido en una fe personal experimentada y vivida. Seguro que a otros tantos no les ha llegado el momento, pero quiero pensar que cuando les llegue el momento, recordarán que una vez, hace mucho tiempo, un colegio Claretiano les transmitió la fe, el optimismo por la vida y el amor por los demás.

Ha merecido la pena. ENHORABUENA.

Equipo Pedagógico Provincial

Equipo de Titularidad

Provincia Claretiana de Santiago

jueves, 25 de abril de 2024

CLARET FUENSANTA ES OTRA HISTORIA

 Súper C pactando por el mundo nos ha impulsado a descubrir el Pacto Educativo Global

Este curso ha sido intenso, lleno de experiencias y vivencias que han ido transformando nuestras mentes y nuestros corazones. Por eso, hemos querido compartir con las personas más cercanas todo lo vivido y aprendido y no hemos podido resistirnos a gritar a los cuatro vientos nuestro descubrimiento porque, nuestro colegio debe traspasar sus muros.

Iniciando curso, en septiembre, recibimos un mensaje de Súper C: la versión fuensantina, producto de la mirada infantil de niños y niñas de nuestro Padre Claret.

Súper C llegó, con maletas facturadas en distintos destinos, tras un viaje intenso por toda nuestra casa común y consternado por los contrastes que a veces en ella se dan, decidió enviar unas cuantas maletas a los alumnos de Fuensanta repletas de información y objetos que daban pistas para descubrir los distintos retos que nos quería compartir.



Así fue como de la mano de Súper C los alumnos de primaria decidieron que, si Súper C solo no podía, ellos tampoco; por eso, decidieron pedir ayuda a los alumnos de secundaria y nacieron las primeras alianzas: los apadrinamientos internos.

Esos apadrinamientos fueron muy especiales y generaron complicidades fruto de la experiencia de estar al servicio del otro. Cada alumno debía de acompañar a su apadrinado y cada apadrinado debía acompañar a su padrino. Así se lanzaron a los cuatro retos que tenían como compromiso principal cuidar la casa común.

El primer reto liderado por los alumnos del primer ciclo de primaria y segundo de secundaria descubrieron que la naturaleza necesitaba ayuda y tras propiciar la alianza externa con los bomberos de Valencia decidieron que tenían que pasar a la acción. Comprometerse haciendo e ir más allá: responsabilizar a sus familias.

Iniciaron el reto repoblando una zona afectada por un incendio en su localidad, continuaron creando un huerto en el cole y acabaron planteando a todas sus familias la necesidad de acciones pequeñas a través del lápiz plantable.

El segundo reto liderado por los alumnos del segundo ciclo de primaria y tercero de secundaria fue conocer la realidad que viven los animales en todos los rincones del planeta teniendo en cuenta sus necesidades y sobretodo, planteándose si el trato que les damos es justo y digno.

Iniciaron el reto conociendo la protectora Felcan y tras crear la alianza con ellos, visitaron un refugio y lanzaron una campaña de manufactura de collares solidarios que con su recaudación pudieron afianzar la alianza externa.

El tercer reto liderado por los alumnos de quinto y sexto de primaria y cuarto de secundaria fue conocer la situación actual de las aguas trabajando de la mano con los técnicos de Aguas de Valencia y esto posibilitó una nueva alianza que llevó a nuestros alumnos a salir a zonas turísticas cercanas y ser conscientes de los abusos que el ser humano realiza en su vida diaria. Tras una asamblea de alumnos se creó una petición de firmas online para solicitar el apoyo en el Ayuntamiento y colocar papeleras en los lugares turísticos y potenciar así el cuidado de la casa común.

Y el cuarto y último reto, liderado por los alumnos de primero de la eso y la Formación Profesional Básica consistió en conocer los contrastes mundiales que generan la contaminación textil y adentrarse en la reflexión de que una parte del mundo esté inmerso en un sistema de fast fashion creando en la otra parte, un increíble cementerio textil. Tras un módulo de corte y confección para dar alternativas a la ropa usada, generaron una campaña de sensibilización llamada “La ropa como los gatos tiene 7 vidas” y con ella buscaron la alianza de otro colegio institucional que se sumó a la causa: Claret Benimaclet.



Tras la superación de los cuatro retos de la mano de Súper C y habiendo viajado a muchos destinos, íbamos conformándonos como una comunidad abierta a la acogida y con el firme compromiso del cuidado de la casa común y de la renovación de la economía y la política.

Pero Súper C tenía previstos mayores retos para nosotros y se alió con el alumnado más pequeño, los alumnos de infantil.

A ellos les marcó como destino el Polo Norte y les pidió que susurraran a sus mayores un gran secreto: en la vida hay gente realmente especial que se convierte en guardianes de piedras preciosas y necesarias para la creación de un nuevo humanismo.

Así pudieron descubrir los alumnos de primaria un valor que a modo de piedra preciosa guardan nuestros mayores: el amor incondicional y; los alumnos de secundaria pudieron descubrir que las personas con discapacidad deberían nominarse personas con capacidades extraordinarias porque no hay nada más extraordinario que derribar muros salvaguardando la inocencia, el esfuerzo y la superación.

Y cuando los más pequeños regresaron del Polo Norte, consternados de la situación que están sufriendo los osos polares, lanzaron un compromiso a toda su comunidad. Pero, rápidamente, entendieron que debían buscar mayores alianzas y buscaron jóvenes generaciones del Claret Benimaclet y del Claret Segovia, afianzando así dos nuevas alianzas institucionales.

  

Súper C se entusiasmó al ver que sí pueden hacerse muchas acciones que pueden generar alianzas y sinergias entre los seres humanos para alentar compromisos importantes y con ese entusiasmo decidió coger aire, observar el mundo desde otra perspectiva porque no cabe duda que hay sombras, pero, también, muchas luces.

Por ello, cuando tomando aire se encontró con el Papa Francisco le quiso mostrar todo lo que había observado y ambos coincidieron en que el Pacto Educativo Global no es un sueño, sino una meta alcanzable.



“En Fuensanta construir el proyecto de la mano de sus jóvenes generaciones ha sido descubrir el Pacto Educativo Global junto con las verdades que dan sentido a la vida”

Comunidad educativa Claret Fuensanta